lunes, 5 de septiembre de 2016

Utopía

"Como las cenizas en el viento nos desvanecemos en el recuerdo de lo que fuimos y del tiempo que vivimos"


Hace mucho tiempo que no escribo por aquí las novedades de mi vida, y eso se debe a que he necesitado mucho tiempo de reflexión y pensamiento para poder poner en orden las cosas de mi día a día, de lo que soy y de lo que quiero. Han sucedido una serie de acontecimientos de los cuales he podido aprender, a base de sangre y llanto, que la vida no es siempre un camino de rosas que nos conduce a la cima. Unos más trágicos que otros, pero todos ellos necesarios para poder abrir los ojos ante lo que realmente es la vida. Ansiedad, agonía, soledad, desdén... Todo lo vivido hace un tiempo me ha servido para "espabilar" y empezar a corregir todos los fallos que he tenido a lo largo de mi vida y que, más bien tarde, he visto que eran necesarios corregir a toda costa, ya que no me dejaban avanzar en ningún aspecto. Hay momentos en la vida en las que uno tiene que darse de bruces contra un muro al cual pretendía atravesar sin problema, pero que sin haberlo observado bien, no se percataba de que era de hormigón armado. El golpe ha sido duro, el dolor intenso, pero la experiencia me ha servido para aprender de mis errores y corregirlos para un porvenir. La herida ya cicatrizó hace tiempo, y cada vez que veo posible el repetir alguno de los errores, la observo y me doy cuenta de que va a ser peor. La superación personal es uno de los hitos más difíciles para muchas personas, para poder avanzar y llegar a ser lo que realmente quieren ser. Uno tiene que estar bien consigo mismo para poder hacer que los demás estén bien, mas es el amor propio lo que dictamina cuan felices podemos llegar a hacer a nuestros seres más allegados.

Con el paso del tiempo, uno se va dando cuenta de muchas cosas. Sobretodo cuando llega a un punto de madurez mental en el cual analiza de forma autocrítica todas sus acciones y las de los demás, llegando el punto de pensarse dos veces el hacer las cosas por ciertas personas al ver que estas no les aportan nada. En este punto me hallo, pensando bien en que acciones y para con qué personas puedo hacerlas, pudiendo obtener algo a cambio. Y no me refiero ya a hacer favores y que sean devueltos, sino el sentimiento que se pone cuando se llevan a cabo esas acciones. Hay veces en las que he llegado a cansarme de intentar hacer algo por X personas, y no ver nada por su parte. Ni ganas de intentar hacer las cosas, ni de agradecerlas. Y eso ya es algo que, moralmente, me está cansando. A veces uno también necesita que de vez en cuando, sin pedirlo, llegue alguien y le de un abrazo de ánimo, o con cariño. El otro día, mientras escuchaba música, me puse a reflexionar sobre ello y mi mente voló a unos niveles inimaginables. Y mi conclusión fue la siguiente:


"Por muy fuertes que seamos de espíritu, siempre vamos a necesitar de alguien que nos ayude a vislumbrar un pequeño ápice de felicidad. Incluso aquellos que intentan siempre ser un fiel punto de apoyo moral y que intentan hacer felices a los demás (en los que me incluyo), a veces necesitan que haya otra persona que les aporte esa felicidad. Todos necesitamos en algún momento a alguien con quien compartir nuestras inquietudes, sueños y con quien nos gustaría pasar momentos un tanto más íntimos. Eso no quita que uno no sea feliz, pero sí que se puede llegar a echar en falta ciertas cosas"

-Pensamientos de un viejo lobo negro-

A esa noche de pensamientos, la acompañaba esta canción: 


Y con esto ya hay pocas cosas más que contar. No hay ninguna novedad importante en cuanto a mi vida sentimental, y si la hubiese, creo que ya no os enteraréis salvo que me lo preguntéis en persona. Lo único que cabe destacar de mi vida ahora mismo es el auge en el que se encuentra mi nuevo grupo de música Lord of the Flies , que después de el concierto del día 2 hemos conseguido llegar al alma "heavy" de varias personas, y todos salimos contentos del concierto. Tanto el público como los miembros del grupo. Ahí os he dejado el link para que le echéis un vistazo a nuestro trabajo y avances. 

Sólo espero que algún día me devuelva las alegrías que añoro, y un poco de cariño tampoco estaría mal.